¿Por qué los cristianos
le decimos «no» a Halloween? ¡Justamente porque somos cristianos!
Halloween es una antigua fiesta pagana en la que los druidas (sacerdotes de
ídolos) iban de casa en casa recaudando dinero para el dios Samain. Cuando una
casa rehusaba cooperar, los sacerdotes maldecían y echaban maleficios a sus
habitantes.
Aun con el riesgo de
pasar por retrógrados, ¿cómo no levantarnos vigorosamente contra lo que supera
el marco de una simple fiesta? Lo que debemos transmitir a nuestros hijos es un
mensaje de paz, de amor, de vida: la buena nueva de Dios para la salvación de
los hombres.
Leemos en Deuteronomio
30, 19: “Os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la
maldición; escoge, pues, la vida”
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Gracias por participar comentando! Por favor, no te olvides de incluir tu nombre y ciudad de residencia al finalizar tu comentario.